En medio de tiempo de mucha actividad, se presenta este caso de un menor de aproximadamente 12 años de edad que sufre de depresiones severas que arrastran ataques de pánico. Este agobia a su madre ya que es tanto su miedo que lo transmite de una forma rara de actuar y reflejar sus sentimientos. Es un caso de mayor sufrimiento ya que sus familiares no pueden reflejar lo que sienten para no agravar la situación. En casos como este los padres no deben abandonar en ningún momento al menor por mas complejo que sea el mismo. De mucha prioridad hay que buscarle ayuda psicológica al igual que darle suficiente atención aunque parezca agotador, hasta el último momento. Conozco un caso parecido que el hijo de una dama reacciono con rebeldía al enfrentar una familia disfuncional. Hoy día, es un hombre de bien, encaminado a los estudios pero todo gracias a las ayudas por las cuales su madre lo condujo sin rendirse. Esto demuestra que todo es posible aun así en el momento de mayor OSCURIDAD.
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